Hexa

Lógica recíproca

Kits de construcción para niños

Hexa: un metro cubico de estimulación y creatividad.

Hexa es un kit de construcción geométrica en madera natural pensado para acompañar el crecimiento de niños y niñas desde los primeros juegos sensoriales hasta las experiencias de arquitectura y geometría.

Fabricado artesanalmente en haya y pino, su estructura de 1 m³ invita a explorar el espacio desde dentro: tocar, medir, cubrir, habitar y comprender las formas que sostienen el mundo.

Este material forma parte de la colección Lógica Recíproca, una línea que une el arte, la arquitectura y la exploración constructiva a través del juego libre.

Características técnicas

  • Material: Haya y pino de bosques de proximidad, acabado natural, lijado suave y seguro para niños.
  • Montado final: 1 m × 1 m × 1 m (1 m³) una vez ensamblado.
  • Piezas incluidas: 12 bastones 8 conectores 1 bolsa de almacenaje
  • Edad: 10 meses – 12 años recomendados (ampliable a todas las edades).
  • Uso: Interior o exterior cubierto, suelo plano recomendado.

Beneficios pedagógicos: orientación espacial, motricidad gruesa, lógica matemática, creatividad arquitectónica, colaboración.

Metodologías activas: Montessori, Reggio Emilia, Waldorf…

¿Cómo usarlo?

Un material vivo, versátil y evolutivo

Un material sencillo en su forma, pero lleno de posibilidades.
Hexa acompaña el crecimiento de niños y niñas a lo largo de muchas tapas del juego, desde el descubrimiento sensorial hasta la exploración simbólica y el pensamiento matemático.

Etapa sensorial – bebés que gatean

Hexa puede convertirse en un pequeño universo de estímulos.
Cuelga de su estructura elementos sonoros o móviles naturales: cintas, campanas, conchas o piezas de madera.
Al pasar gateando, los bebés los tocarán, los harán sonar, observarán las sombras y disfrutarán del movimiento.
También puedes colgar telas con flecos o retales de distintos tejidos, creando un túnel sensorial que invita al tacto y al juego.

Etapa motriz – niños y niñas que caminan

A medida que crecen, aparece el deseo de refugio y escondite.
Coloca telas por encima, sujétalas con pinzas, crea ventanas y puertas.
El cubo se transforma en cabaña, casa o guarida, un espacio propio donde entrar, salir, esconderse y mirar el exterior desde dentro.
Un pequeño laboratorio de autonomía y juego libre.

Etapa simbólica – construir mundos

Construir cabañas es una necesidad universal.
Hexa se convierte en escenario, casa, barco o laboratorio, según el día.
A través de este juego simbólico los niños ensayan roles, expresan emociones y exploran la arquitectura como extensión del cuerpo y del pensamiento.

Etapa lógica – pensamiento matemático

¿Qué mejor forma de comprender el espacio que construyendo un metro cúbico real?
Con Hexa, los niños pueden ver, medir y habitar la geometría.
La noción de volumen, proporción y estructura deja de ser abstracta para volverse tangible.
Así, el juego se transforma en una herramienta de aprendizaje y experimentación.